“Tengo como un mutante en mi interior”

Esta semana no sabía sobre que escribir, y ayer tubo revisión conmigo una paciente con diástasis de rectos cuya primera cita fue de las que no se olvidan por las expresiones que usó para describir su problema.   El día que llegó a la consulta me comento que no tenía, tras su embarazo, ningún síntoma de que “ahí abajo” (¿Por qué la gente no lo llamará por su nombre?) funcionase nada mal, pero en su tripa cuando cogía al bebé o hacia algún tipo de esfuerzo, le salía un huevo justo por encima del ombligo, como una cabeza decía ella. Me miraba con cara de “sé que no te lo estas creyendo, pero es verdad” y concluyo diciendo “es como si tuviese un mutante en mi interior”.

Ilustración diástasis de rectos
Ilustración de Viktoria Kabanova (Missmedicus) en dreamstime

¿Qué es la diástasis de rectos?

Hoy vamos a hablar de esos mutantes, que clínicamente se conocen como diástasis de los rectos.   Los rectos abdominales son dos músculos, uno a cada lado del abdomen. Se “enganchan” en la línea alba, (estructura de tejido conjuntivo fibroso que recorre la parte media del abdomen de los vertebrados), en el borde superior del pubis, en la cara anterior de los cartílagos costales de la 5, 6 y 7 costilla y en el apéndice xifoide. Este músculo tiene las siguientes funciones:

  • Si está tonificado mantiene la posición erecta del cuerpo.
  • Al contraerse produce la flexión de la columna vertebral.
  • Su contracción unilateral produce inclinación lateral del tronco hacia el mismo lado.
  • El tono también limita la inspiración máxima y favorece la espiración.

Durante el embarazo, mientras va creciendo el bebé en el interior del útero, los rectos se van distendiendo y separando de la línea alba, esto permite que el bebé tenga espacio. Esto es posible gracias a los cambios hormonales y no produce dolor ya que el crecimiento es progresivo así que, la separación abdominal es progresiva.

¿Cómo evitar la diástasis de rectos?

s difícil prever si va a ocurrir o no, si que es cierto que si ya lo has padecido anteriormente o si coges mucho peso en el embarazo tienes todas las papeletas. Yo recomendaría cuidar la alimentación e hidratar el tejido.

¿Cómo puedo saber si yo tengo una diástasis de rectos?

No a todas les pasa que les aparece el contenido visceral hacia fuera en el esfuerzo, a veces la separación es de pequeños centímetros pero se puede palpar con los dedos. Compruébalo y si te ocurre ponle remedio para que no vaya a más o tengas otro tipo de problemas.

¿Qué podemos hacer por ti y tu diástasis de rectos?

Debemos devolver el tono al abdomen. Para eso nada de abdominales clásicos, no te voy a dar ninguna razón la comprobaras tu sola cuando los realices y aparezca el “mutante” en cuanto despegues la cabeza del suelo, porque aumentan la presión a nivel abdominal y así no mejorarás. Lo que debes hacer para cerrar el espacio entre tus rectos es gimnasia abdominal hipopresiva, es la forma de trabajar las fibras que proporcionan el tono al abdomen sin dañar el suelo pélvico. Además para mejorar antes, se puede combinar con electroestimulación muscular de los rectos, con un Compex o un Electroestimulador (los encontrareis en Decathlon, Forum y ortopedias).

¿A que estas esperando a ponerle remedio? Busca, seguro que en tu cuidad encuentras algún sitio donde puedas realizarlos de la mano de un fisioterapeuta experto en gimnasia hipopresiva o un experto en Reprocessing Soft Fitness.